En el mes de diciembre de 2020, el gobierno del Reino Unido publicó nuevas disposiciones que -según sostienen- buscan mejorar la transparencia en sus jurisdicciones. A raíz de esto, el Primer Ministro y Ministro de Finanzas de las Islas Vírgenes Británicas (BVI), Andrew A. Fahie, comunicó sus reservas para con el documento presentado y advirtió que el proyecto puede “representar una amenaza para la privacidad” garantizada en la Constitución de BVI.
 
Para Fahie, la decisión del gobierno británico “ordena la creación de registros de acceso público” que van a permitir “el acceso del público en general a una variedad de datos de naturaleza personal y privada». Si bien el gobierno local aseguró que mantiene su compromiso de cooperación con organismos internacionales para la prevención de delitos financieros, sostuvo que la actual regulación de servicios financieros en las Islas cumple con las mejores prácticas globales, y que será el Tribunal Superior de las Islas Vírgenes el que considerará las disposiciones ordenadas por Gran Bretaña.
 
Nos da placer ver como, más allá de las tendencias mundiales, reforzadas con la Pandemia y la elección de Biden en los Estados Unidos, BVI ha tomado la delantera en la protección de la privacidad de los individuos y cómo se ha convertido en ejemplo para el resto de la industria offshore y de quienes defienden la competencia fiscal. Los mantendremos informados de cualquier cambio que se produzca en este campo.